Hola mucho gusto, como ha estado todo? por acá varias cosas han cambiado, hemos dado giros inesperados, no sé si soy la misma Majo pero tal vez un poco distinta o tal vez soy la misma pero con un poquito más de sabiduría.
De enero acá los saltos y las melodías de mis días han sido muy variadas, empecé el año con muchas ganas, en el inter tuve que parar y reajustar un poco, cositas que hasta ahora parece que van tomando forma, los medios para escribir también han mejorado, entonces me parece importante hacer un recuento, esto es sobre todos los cambios y estados mentales, los pesos y las trabas que me he encargado de alimentar, especialmente con temas que no se pueden controlar.
Sabía que éste año vendría cargado de retos nuevos, estoy en mis plenos 27 y entiendo que es una etapa fluctuante en muchos aspectos, el clima y la forma de pensar han sido los reflejos más claros que he podido encontrar.
Fuertes lluvias y arcoíris y varios cielos despejados.
El tema de la adultez y la maternidad fueron protagonistas al empezar el año, en mi círculo nacieron a la par dos bebés ♑️ que, tengo la impresión un día se van a conocer aunque no haya ningún lazo entre ellos (más que yo, que les conozco a ambos) y he escuchado sus historias a lo lejos, por lo que eso hizo que me ponga a pensar en todas éstas cosas que vienen con la edad.
Hay algo que tengo claro, ahora no es mi objetivo ser mamá, es algo a lo que le tengo miedo/respeto por todo lo que implica, me parece frustrante también saber que por ser mujer ese es como el ideal al que llegar; no digo que no me veo nunca en esas instancias pero hay demasiada información y las enseñanzas de las mamás y abuelas ahora parece que han ido desapareciendo y han sido reemplazadas por los miles de consejos y videos en internet.
Sé que me abrumaría mucho y no sabría como hacerlo “bien”, (porque eso se espera, que seas inmediatamente la mejor mamá). Agradezco lo que tuve, agradezco la infancia sin tanta tecnología que disfruté, no sabría como hacerlo diferente ahora si los celulares son lo primero que aprenden a usar los niños, además creo que nadie podría enseñarte a criar a alguien en la manera en que ese alguien específico lo necesita, los humanos somos muy complejos y aunque todavía estoy recopilando información, éste es un tema que ya no se me hace tan lejano, si está pasando el tiempo y ya no tengo 18 años, i can feel it.
Eso por un lado, por otro, la independencia ha llegado a mí de una manera curiosa, no sé si a todo el mundo le pase que sus padres son los que se “van” y tu te quedas en casa, pero es otro tipo de salto a la adultez, yo no sabía que cuando un vínculo importante toma la decisión de seguir por caminos separados y hay mucho amor de por medio se podría considerar como un duelo, capaz es un poco obvio, como en cualquier relación que se transforma, pero no sabía que también podría darse entre madre e hija.
Mi mami y yo hemos sido nuestro complemento durante estos 27 años de existencia que llevo y a pesar de que ya habíamos hablado del tema y ya era tiempo, el momento en el que te ves sola y por tu cuenta de verdad es súper complejo, a pesar de que crecí estando relativamente sola siendo hija única, de todas maneras ha sido un proceso doloroso, not gonna lie.
Como recién adulta que soy puedo corroborar que se siente raro y no hay nada que puedas controlar, lo único que pude hacer fue refugiarme en planes con amigas, en el trabajo, en terapia, organizarme mucho y escribir como loca todas las cosas que estaba sintiendo, admito que me equivoque mucho y me porte como una niña pequeña a la que le quitan su muñeca, pero mi muñequita mamá ya tenía el derecho de hacer su vida como ella quisiera y oh! sorpresa, yo también.
A la par, cosas difíciles que afrontar en el área laboral, yo llegaba temprano al trabajo a pedir por guía, a pedir por que las cosas cambien, porque se estaba volviendo un poco insostenible el ambiente y tratar de crear y proponer “moda”; a éste punto siempre me va a impresionar el poder de las palabras y de las intenciones, sabía que no me quedaba mucho tiempo ahí si no ocurrían cambios importantes, y que bueno que al final “no tuve que hacer nada más” que pedir, ser paciente, confiar y mejorar cada día.
Ahora lo puedo decir tranquila y resumido en estos pequeños párrafos, pero fue potente y creo pude entender perfecto ese momento que describe Liz Gilbert (mi amiga más íntima) de cuando ella estaba en el baño y rezó por primera vez. Iykyk
Ahora tengo una nueva compañera de trabajo y los días ya no se sienten como un intento de huida constante, de hecho han sido mucho más apremiantes, igualmente retadores, pero con aprendizajes que no me hubiera gustado perderme si le hubiera hecho caso a esta idea de escapar ante la incomodidad, la que te hace crecer del otro lado si la atraviesas.
Y para finalizar, como cereza en el pastel de éstos últimos meses con 27, me hice una máster en tratar de controlar mis emociones, mi cuerpo me dió algunas reacciones que no estoy lista para compartir pero si puedo decir, al menos para quienes tenemos ese temor de perder el control, que la vida también puede ser más divertida con un poquito de caos; con los cambios en mis sistemas familiares y laborales tenía que sostenerme de algo, darme una sensación falsa de tener todo organizado, que nada se me mueva, que nada se me escape, varias cosas por hacer ya establecidas, pero las formas cuadradas ya estaban caducadas y claramente no pude adelantarme, ni pelear con lo que me estaba esperando. Decidí saltar.
Aaay! marzo… podría decir fue de los meses más lindos pero más desafiantes que he tenido, de mucho amor, de una inspiración impresionante para escribir poemas, ganas de arte y de muchas lecciones sobre aperturas en muchos niveles, me pude ver eligiendo lo más fácil, negarme, huir y querer salir corriendo cuando las puertas se estaban abriendo, estaba muy cómoda en dónde no habían retos, pero ya la vida mismo me dió unas buenas y azules sacudidas que agradezco full porque me ayudaron a soltar los saboteos y voltear a verme con compasión, sabiendo que efectivamente ya nos movimos de escalón, de aquí sólo para arriba.
Ésta soy yo 3 meses después de enero, aún aprendiendo a poner límites, a hacerme responsable de mí misma, aún aprendiendo a hacer que se escuche mi voz, y las cosas en las que creo, esta soy yo, haciendo lo que más me gusta, haciendo un poco más disfrutable lo que no, ésta soy yo una diseñadora de modas que escribe y hace muchas preguntas y cocina mejor, que a veces desearía no ser tan mental, pero va por la vida tratando de ver todo con los ojos del corazón, igual de curiosa, igual de brillante, igual de artista, abriendo portales por todas partes.
La vida es demasiado juguetona, espero que no se nos olvide que esto es un baile, que es un pequeño momento prestado, nada nos llevamos, mas que la satisfacción de haber vivido y amado como hemos querido y que nos podemos presentar de nuevo una y mil veces más.
Ésta soy yo hoy, mucho gusto.
Con amor y deseándote muchos portales abiertos. 🩵🔮📭
Hola Majo!
Tal vez ya te has dado cuenta al leerme (gracias por ello!! 🙏) y de todos modos aquí te lo confirmo:
también soy una persona que… “a veces desearía no ser tan mental, pero va por la vida tratando de ver todo con los ojos del corazón, igual de curioso, igual de brillante, igual de artista, abriendo portales por todas partes.”🪞
Gracias por permitirnos conocerte de nuevo y felicidades por todos los saltos de escalón que has dado ✨